Incertidumbre por el futuro

Perla de inspiración

¿Qué pasará mañana…?

Elaborado por: David Vera

Somos seres en constante cambio y evolución, y muchas veces nos anticipamos a lo que la vida nos depara. Nuestros sueños o los objetivos que nos trazamos, lo ubicamos en lo que llamamos Plan de Vida.

Pero ¿qué pasa cuando nos vemos rodeados de situaciones críticas que no estaban previstas en nuestro camino? sentimos esa angustia de que, lo que le pasó a alguien cercano o conocido nos puede pasar a nosotros también. 

Es ahí cuando nos hacemos esta pregunta

¿Qué pasará conmigo?,

¿Qué vendrá después? o

¿Será esta la decisión o camino correcto?

Cuando la incertidumbre se apodera de nuestros pensamientos

Este valioso tema, fue comentado en nuestro espacio Conversando con tu Veci(ndad) y nos podemos dar cuenta que somos muchos los que compartimos ese sentimiento llamado INCERTIDUMBRE, miedo al futuro, a lo que nos pueda pasar por alguna situación que esté fuera de nuestro alcance.

Vivimos la vida esperando a que nuestros planes se den de manera tranquila, pero sin la certeza de que la siguiente celebración o quizás el viaje que queríamos realizar por azares del destino no se dé. Sentimos miedo y preocupación, al perder un empleo, al cambio de vida que se transforma en torno a una situación externa a nosotros, o inclusive a contraer una enfermedad o virus. 

Temor, es otra de las sensaciones que quizás podemos describir al momento de no saber qué pasará con nuestro futuro. 

Sin embargo, tenemos varias respuestas que quizás ayuden a calmar esa ansiedad o angustia que nos atacan en las mañanas. Por esa razón, les queremos compartir este texto, para que seas tú quien decida abrir la cajita del futuro de miedo y aflicción y te sorprenda con alegría,esperanza y ánimo.

Al lado oscuro del camino, ¡abrázalo!

No hay que temer, si nuestro camino tiene un lado sombrío. Recuerda que el negro también forma parte de la gama de colores que tiene la vida. La noche, por ejemplo, a pesar de su oscuridad siempre busca la manera de brillar y hacerse notar a través de las estrellas como su ayuda, y que tal, si para esta reflexión, lo trasladamos hacia nuestro ser. 

Cuando la incertidumbre es nuestra parte oscura, busquemos una manera más bella de brillar. El presente es nuestro aquí y ahora. Es lo que nos mantiene vivos y sabemos que somos dueños de lo que tenemos, poseemos y hacemos.

Todo lo que hacemos tiene un propósito, por eso es necesario que disfrutes de lo que eres. No dejes que te aflijan los pensamientos negativos, como todos en algún momento hemos escuchado “vive un día a la vez”.

Basta con vivir un día para que, al momento de irte a descansar, y analices de todo lo bueno o lo malo que pasó. Y tomes con tranquilidad si algo faltó. No te preocupes, porque quizás mañana tengas otra oportunidad para realizarlo.

¿Y si fuéramos niños?

Recuerda cuando eras pequeñ@, y jugabas tranquil@ o hacías tus cosas con la mayor de las calmas, sin importar el mañana. Solo con la esperanza de que al día siguiente puedas vivir y disfrutar de lo mismo del día anterior. Esas emociones que de niños no nos hacía sentir miedo por lo que pueda suceder, sino una sorpresa de lo que se dará. La alegría de esperar que mañana sea un mejor día.

Todos tenemos un/a niñ@ interno, que con el pasar del tiempo, ya no lo dejamos salir. Pero qué tal si así fuera, si dejamos irnos por esas emociones de niñ@ en todo aspecto de nuestras vidas. Y lo vamos compaginando con la vida de adulto que llevamos ahora. Vamos contagiando de ese sentimiento a quienes nos rodean, porque siempre es más lindo tener el alma de un niño con la fortaleza de un hombre.

Tener fe en mi propósito

Me gustaría compartir un extracto de un poema de Lilly Goodman, que fue quien inspiró más la perla y la rueda de nuestro conversatorio:

Del poema «Al final» de Lilly Goodman nos dice lo siguiente: 

“Y aprendí que en la vida todo tiene un sentido,

Y descubrí que todo obra para bien

Y que al final será mucho mejor de lo que vendrá

Es parte de un propósito y todo bien saldrá”

Está en nosotros adaptarnos a la incertidumbre del futuro, a enfrentar las dudas de cada paso en el  camino. Siempre tenemos momentos de bloqueo en los cuales simplemente no sabemos qué sigue después o no encontramos las respuestas. 

Arriésgate a caminar en la incertidumbre, no te juzgues y aprende de cada paso. Y recuerda siempre, todos tenemos un propósito de vida y es lo maravilloso de seguir viviendo porque la vida, con todas sus vicisitudes, es bella.